Un chico de 17 años murió anoche al recibir un balazo en el pecho cuando llegó en moto con un amigo a un local donde venden combustible. La versión policial es que ambos se trenzaron en una discusión con otros dos que también llegaron en moto, y que todo terminó a los tiros luego de que el comerciante les dijo que no era lugar para discutir, dijeron fuentes policiales. El amigo de la víctima quedó grave porque recibió dos disparos en el costado izquierdo de su tórax y anoche era operado porque una de las balas le perforó un pulmón, precisaron en la Policía. Anoche, un ajuste de cuentas era la principal hipótesis sobre el móvil del violento ataque.
Todo pasó alrededor de las 21,30 a la altura del 2298 Norte de la calle Colón, un par de cuadras al Sur de avenida Benavídez, en Santa Lucía.
Hasta allí habían llegado en una moto Honda la víctima mortal, Gabriel ‘Gabi’ Castro (17) con un amigo, el dueño de la moto, Diego Alejandro Garramuño (22).
Sergio Barzola, cuñado de Castro, explicó anoche que el jovencito fallecido era changarín, el menor de 7 hermanos y vivía con sus padres cerca del lugar del crimen, en la Villa Juan XXIII, en Chimbas. Y que creía que los habían baleado al querer robarles la moto.
De todos modos, en la Policía sospechaban otra cosa, en base a los datos que proporcionó básicamente el dueño del local donde venden combustible. Según ese relato, los investigadores suponían que entre ambos grupos se conocían, por el modo de tratarse y la discusión que se produjo entre ellos. Es más, ya tendrían identificados a los agresores.
Ese comerciante habría asegurado también que cuando les pidió que se fueran a discutir a otra parte, dio media vuelta para entrar y ahí escuchó los disparos. Ambos jóvenes quedaron tendidos en el piso, uno sin vida en el ingreso a su casa, el otro a salvo de milagro, pero grave.
