Al menos ocho testigos apoyaban la versión de una relación tormentosa, teñida de amenazas de muerte (incluso con armas), el control de sus horarios o las continuas llamadas al Servicio Penitenciario donde la mujer trabajaba. Y una idea fija: ser víctima de una infidelidad de su esposa. Luchar contra esas y otras pruebas resultarían una misión demasiado complicada para Leopoldo Jacinto Marinero (31 años, foto) por eso ayer por medio de su defensor Pablo Flores, acordó con la fiscal Alicia Esquivel Puiggrós, plantearle al tribunal un juicio abreviado en el que confiesa haber matado a su esposa Delia Bustamente (31) de al menos un certero golpe con una piedra de 6,300 kg., cuando dormía en su casa de calle 11, unos 100 metros al Oeste de Costa Canal, Pocito, en los primeros minutos del 26 de mayo de 2008.
Ese delito técnicamente es gravísimo, porque se cometió cuando la víctima no pudo defenderse (alevosía) y por el vínculo que unió durante 10 años a víctima y victimario: el casamiento. Ahora los jueces Juan Carlos Peluc Noguera, Ernesto Kerman y Félix Manuel Herrero Martín (Sala II de la Cámara Penal) evaluarán la petición para aceptarla o no. Si la aceptan (lo más probable) Marinero tendrá perpetua.
