En abril del año pasado, el juez Leopoldo Rago Gallo, titular del Juzgado Federal Nº2, ordenó una serie de allanamientos en 16 locales nocturnos en distintos puntos de la provincia en los que se explotaba sexualmente a mujeres. Luego de los procedimientos, hubo un total de 24 detenidos.
Tras la investigación, el magistrado procesó a 6 acusados, 3 de ellas mujeres, por el delito de trata de personas, que tiene penas severas. Además, hubo otros 10 procesados por promover el negocio de la prostitución (un delito menor) y la explotación económicamente de la venta de sexo y en algunos casos, violar la Ley de Migraciones. En los allanamientos encontraron a jóvenes oriundas de países como Colombia y Paraguay, según constó en los operativos.
