Uno de los padres de la criatura como el técnico, Marcelo Gallardo, no logró contener la emoción al finalizar el encuentro, sobre todo al recordar a su madre, recientemente fallecida: “Es algo muy importante esto que logramos. Somos campeones porque no lo merecemos. Quiero dedicárselo a mi vieja que…”, puntualizó el Muñeco, cuando las lágrimas y la emoción no lo dejaron continuar. Un entrenador que llegó con ciertas dudas por su poco experiencia, pero que demostró su jerarquía guiando a un equipo de River a ganar una copa internacional tras 17 años.
Mientras que Leonardo Ponzio afirmó que “siempre el fútbol brinda revancha y yo la tuve. Agradezco el apoyo de este cuerpo técnico y los aplausos del público en el final. Estoy muy emocionado y queremos celebrar”.
Otro que se mostró muy emocionado fue el volante, Leonardo Pisculichi, quien entre lágrimas afirmó que “es una alegría muy grande la que vivo en este momento. Sabíamos que al ganarle a Boca se daba un paso gigante, pero quedaba superar en la final a los colombianos y lo conseguimos con autoridad”.
Por su parte Teófilio Gutiérrez aseveró que “llegué a este club con la intención de ganar cosas importantes y lo estamos logrando. Hemos realizado una gran Copa y es emocionante que la gente pronuncia tu nombre. Somos un grupo muy sano que formó una importante familia. ¿Mi futuro? Vamos a disfrutar este momento, pero el futuro lo veré más adelante”.
