Hace poco más de un año, ante Escocia y en Rosario, Los Pumas iniciaban un nuevo ciclo. El ciclo de Tati Phelan y Fabián Turnes al frente de la selección argentina, en reemplazo de Marcelo Loffreda. Y ayer, el Chino Turnes hizo un balance de este primer año, al que consideró positivo, dijo que no siente presión por la comparación con la exitosa etapa de Loffreda y confesó que le hubiese gustado poder contar con Agustín Pichot en el inicio de su proceso, "que fue duro".

Turnes estuvo ayer sorpresivamente en San Juan dando una clínica de rugby junto a Serafín Dengra y Nicolás Fernández Miranda, algo inédito en San Juan por la experiencia y el nivel de las figuras invitadas, todos con pasado en Los Pumas.

"La evaluación de este primer año de trabajo es sencilla: fue positiva porque fue un año de transición y de asentamiento como staff. Si vemos lo que pasó hace 12 meses, entonces digo que en este tiempo dimos un paso adelante en cuanto a juego y en cuanto a lo que buscamos como sistema de juego, independientemente de algunos resultados", arrancó Turnes.

En la era Phelan-Turnes, Los Pumas jugaron 10 partidos, de los que perdieron seis, ganaron cuatro y actuaron 47 jugadores en las distintas formaciones iniciales. "Lo defensivo es lo más fuerte de este equipo, además de una entrega que es marca registrada. Pero estamos en deuda con el juego con la pelota. El sistema de juego que tratamos de proponer, muy dinámico, nos está costando. Yo creo que en el primer tiempo ante Inglaterra en Salta o lo que mostramos contra los Barbarians es lo que pretendemos como estilo de juego para los Pumas", indicó Turnes.

Fabián Turnes, ex centro de Banco Nación, tiene 43 años y entre 1985 y 1997 disputó 26 tests con Los Pumas, incluido el Mundial de 1987. Fue entrenador de la Sub 21 y hasta antes de ser DT de la selección era el técnico de la selección de Buenos Aires.

Turnes y Phelan asumieron después de que Loffreda lograra un histórico tercer puesto en el Mundial 2007. Una referencia que, según el Chino, no les pesa. "La presión en realidad se la termina haciendo uno mismo. Sin dudas que después del furor del Mundial uno se vuelve exitista y desde ese punto no es fácil para este staff. Pero estamos tranquilos, trabajando muy duro. El Tano (Loffreda) tuvo ocho años como entrenador y prácticamente trabajó con una generación de jugadores. Nosotros empezamos hace un año y agarramos a parte de esa generación, la otra se retiró en el Mundial. Por eso no nos sentimos presionados. Sabemos que todo va a llegar con tiempo y trabajo", apuntó.

Uno de los que se alejó fue nada menos que Agustín Pichot, quien después volvió un par de meses al Stade Français, para retirarse como jugador el mes pasado. "Me hubiese encantado tenerlo a Agustín en el inicio del ciclo, que es lo más duro. Y cuando volvió, reconozco que me ilusionó que hubiese podido estar ante Sudáfrica, pero fue sólo eso, una ilusión. Respetamos mucho la decisión de Agustín. El ya dio mucho por Los Pumas", cerró Turnes.