El hombre fuerte que comanda la agencia de recaudación del gobierno bonaerense, Santiago Montoya, quedó ayer en l cuerda floja y a punto de ser echado después de criticar al oficialismo y negarse a ser candidato a concejal.

El recaudador había difundido un duro comunicado en que cuestionó al oficialismo por “perder parte de su capacidad para escuchar a la sociedad y a los líderes de la oposición”.

El funcionario usó la vía del comunicado para rechazar una postulación a concejal por el municipio de San Isidro, lo que no se sumará a las candidaturas ´testimoniales´ de la dirigencia kirchnerista, para los comicios del 28 de junio.

La información en torno a su posible salida fue confirmada a Clarín.com por altas fuentes de la gobernación, quienes comentaron el malestar que provocó en Scioli las palabras del recaudador.

Desde La Plata estarían evaluando, en caso de que Montoya finalmente sea echado, reemplazarlo temporalmente por el ministro de Economía provincial, Rafael Perelmiter.

El comunicado de Montoya generó un revuelo tan fuerte que el propio recaudador envió un segundo comunicado en que lamentó “profundamente los malentendidos producidos a partir de las versiones sobre tal candidatura, que nunca llegó a serme formalmente ofrecida”.

Y agrega: “Insisto, y amplío, mi opinión autocrítica acerca de la política nacional y la necesidad de escuchar más a la gente”.

En este nuevo comunicado, sostiene asimismo sus críticas a las candidaturas testimoniales que impulsa el kirchnerimso. “Considero que todo argentino de bien, que anteponga los intereses del país a sus aspiraciones políticas personales, en una situación como la que enfrenta el país como consecuencia de la crisis internacional, está obligado a hacer sus mayores aportes desde el lugar que le toque. Para mi esto significa llevar a cabo la gestión en Arba. Ese es mi compromiso con el país”, dice.