Distendido, calmo y amable, así subió Vicentico al escenario del Estadio Cubierto Aldo Cantoni anoche, donde unas 2.300 personas disfrutaron cada instante. De jeans, remera y saco de color negro, pelo muy prolijo y notablemente más delgado que hace un año, el ex Cadillacs desplegó su amplio repertorio en un show que comenzó muy puntual y de a poco fue haciendo entrar en calor al público. Es que fue una fría noche la de anoche, que incluso obligó al cantante a no sacarse sus guantes (también negros) en las primeras canciones.
Vicentico conversó, contestó a los gritos de los fans, entre tema y tema de su disco Solo un momento (de 2010, pero con una versión en vivo editada este año), mechadas con canciones de la época de Los Fabulosos Cadillacs, como Siguiendo la luna, una de las primeras en aparecer y ser coreadas por un público bastante heterogéneo en edades y géneros (muchos señores coreaban las canciones junto a sus parejas).
Promediando los cuarenta minutos de show, pidió permiso al público para encender un cigarrillo y comenzó un bloque romántico que provocó una marea de suspiros y gritos. Casi como en un acústico y al hilo, vinieron Algo contigo, Paisaje y Si me dejan, para después subir el ritmo, en un show que continuaba al cierre de esta edición y sería para los sanjuaninos otro momento memorable.
