San Juan, 28 de mayo.- El tribunal de la Sala I de la Cámara Penal resolvió este mediodía condenar a Nicolás Agüero (33) a reclusión perpetua por haber matado a golpes a su hijastra Alina Suárez Romero, de apenas 2 años, el 14 de abril de 2010. En tanto que para la madre de la menor, Sonia Romero (27), los jueces decidieron la pena de 2 años de prisión, por lo que seguirá libre (ambos estaban en libertad por vencimiento del plazo de prisión preventiva).
El fiscal Gustavo Manini y el defensor oficial Carlos Reiloba (representa a la parte querellante) había solicitado la pena de cárcel perpetua para Romero y Agüero. El tribunal interpretó, en base a las pruebas, que la mujer también fue víctima del accionar de su por entonces pareja.
El médico forense detectó más de 30 lesiones, entre las que sobresalieron la fractura de dos costillas y el riñón del costado izquierdo, la rotura de un vaso sanguíneo, una vieja fractura en el cráneo y hemorragias en esa zona.
