El español Rafael Nadal aplastó al suizo Roger Federer con una victoria por 6-1 y 6-3 en la final del Masters 1000 de Roma, que logró ayer por séptima vez en su carrera y representó la sexta conquista del año desde su retorno al circuito.
En una hora y nueve minutos, el mallorquín, que desde hoy se ubicará en el cuarto puesto del ranking mundial, dio cuenta del helvético con un juego sin fisuras, caracterizado por la solidez de su saque y una demoledora devolución con la que capitalizó cinco de seis chances de quiebre.
Con la victoria en la capital italiana, donde Federer nunca pudo consagrarse y perdió tres finales, Nadal lo duplicó en la historia de enfrentamientos con 20 éxitos y 10 derrotas.
Desde su regreso al circuito profesional, tras ocho meses de ausencia por lesión, el español venció al suizo en los dos partidos disputados.
Nadal, que ingresará a Roland Garros entre los cuatro primeros cabezas de serie, ya se consagró este año en San Pablo, Acapulco, Indian Wells, Barcelona y Madrid.
Sobre polvo de ladrillo, la superficie del próximo Grand Slam, el español suma 31 triunfos este año y sólo perdió ante el argentino Horacio Zeballos (final de Viña del Mar) y el número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic (Montecarlo).
“Felicidades a ‘Rafa’ por un magnífico torneo. Pasé un buen tiempo con mi familia, pero hoy (por ayer) ha sido el día de ‘Rafa’. Este encuentro fue demasiado duro, pero quiero volver el año que viene’, declaró Federer.