El recorrido de Francisco Narciso Laprida por las escuelas de Capital fue tan exitoso que más de 6.000 alumnos pudieron hablar con el actor que personifica al prócer, clave para la Independencia de este país. Como en el túnel del tiempo, Laprida llega a las escuelas para hablar con los chicos y explicares qué ocurrió el 9 de julio de 1816 y qué papel tuvo San Juan en ese hecho histórico. Ya visitó 43 escuelas, quedan en agenda un par más y el próximo jueves será el cierre del programa en la escuela que lleva el nombre del prócer, a las 16.
La iniciativa de este proyecto fue de la Municipalidad de la Capital y comenzó a ejecutarse a principios de mayo. La primera escuela en visitar fue la Fray Justo Santa María de Oro. Esta elección no fue casual porque este prócer fue el otro sanjuanino que estuvo en Tucumán. El actor, caracterizado de Laprida, es Emiliano Voiro y tuvo que estudiar historia para poder enfrentar las preguntas de los chicos. Por ejemplo, una de las consultas frecuentes fue cuántos años tenía en 1816. El acto, encarnando a Laprida, contestó que 29. El prócer murió a los 43 años.
Esta actividad está enmarcada en una serie de acciones que está realizando la municipalidad capitalina para conmemorar el Bicentenario de la Independencia. Que fuese Laprida el encargado de encabezar los recorridos escolares tuvo que ver que este sanjuanino fue quien presidió el Congreso de Tucumán cuando se firmó la Independencia.
Voiro ya había interpretado este personaje para la Fiesta del Sol pasada. Para elaborar el guión tuvo que asesorarse con especialistas en historia para conocer cada detalle del prócer. Incluso hasta se dejó los bigotes naturales para que su personaje fuese más creíble. El actor contó a los chicos que Laprida nunca usaba sombrero en reuniones públicas, entre otros detalles que sirven para hacer más ameno el encuentro con los alumnos. La llegada de Laprida a las escuelas siempre es una fiesta. Y pretende serlo aún más el próximo jueves cuando sea el cierre de este programa. Es que la idea es que el prócer llegue al establecimiento en una carreta de época, tal como se usaban en 1816, para la época de la independencia.
