Uruguay vendió los derechos de televisión para las eliminatorias mundialistas en 10,5 millones de dólares, dinero que será aportado por la empresa uruguaya Tenfield y la firma argentina Full Play.
El proceso de negociación se cerró cuando la asamblea de clubes aprobó, por aclamación, lo actuado por el Consejo Ejecutivo.
El presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Sebastián Bauzá, expresó su satisfacción por el acuerdo, que estuvo a punto de naufragar por exigencias de las empresas, que pretendían una cláusula de prioridad para el futuro. La misma fue rechazada por la dirigencia charrúa que hizo valer la cuarta posición en el Mundial.
