Las fuertes nevadas de las últimas 72 horas en alta montaña despertaron mucha expectativa en virtud de la necesidad imperiosa de que esta temporada las precipitaciones níveas sean intensas y constantes, y que luego se traducen en un buen derrame que se observará en los buenos caudales en los ríos y por consecuencia en los tres embalses que tiene la provincia: Ullum, Los Caracoles y Cuesta del Viento.
La crítica situación que se dio en el verano fue como consecuencia de que el invierno pasado cayó poca nieve en cordillera y dificultó tener volúmenes de agua suficientes para garantizar una buena distribución para riego. El otro inconveniente que se produjo por la escasez de agua fue que las turbinas de los embalses trabajaron al mínimo y la generación de energía se vio mermada, aunque no fue un problema para garantizar el servicio eléctrico porque la provincia está interconectada a la red nacional, pero si le generó -y genera todavía- un perjuicio económico al estado porque "la bicicleta financiera" para la construcción de Los Caracoles está fundada en la venta de energía a un precio diferenciado a la red nacional.
"Es mínimo lo que nevó, ni siquiera un 5% de lo que necesitamos en toda la temporada. Necesitamos 20 de estos temporales este invierno para tener un buen año hídrico en el verano próximo", sostuvo Jorge Millón, secretario de Recursos Hídricos a cargo de Hidráulica.
El pronóstico de derrame -es la nieve que cuando se derrite va a los cauces de los ríos- se hace recién en septiembre u octubre, y en base a esa estimación es como se calcula la distribución del líquido elemento. La épocas de nevadas se contemplan desde abril a septiembre de cada año, ganando en intensidad a partir de finales de mayo hasta julio, pero no necesariamente un fuerte temporal de nieve en esta época puede ser el indicio de que va a caer mucha nieve.
"Es muy pronto para estimar un pronóstico. De todas maneras no tengo claro si es un anuncio de bueno o malo, porque en otras temporadas en abril ya se dieron temporales fuertes con mucha nieve caída", aseguró el climatólogo Germán Poblete.
Paso de Agua Negra
El paso internacional que une a San Juan con la IV Región de Chile no se vio interrumpido por el temporal de los últimos días, sin embargo el camino por Mendoza a través del Cristo Redentor estuvo algunas horas inhabilitado en la madrugada del jueves. Según explicó la secretaria de Relaciones Institucionales de la provincia Elena Peletier, "en ningún momento estuvo la necesidad de interrumpirlo, porque la nieve que había caído en ambos lados no había sido lo suficientemente importante para que se tomara la decisión de cortarlo", destacó la funcionaria. El objetivo que se planteó el gobierno sanjuanino es tener abierto el Paso hasta "por lo menos" el 20 de mayo, justo la fecha en que cumplirá 6 meses habilitado al tránsito en la temporada 2009-2010.
