A semanas de que comience la primavera y cuando los outlets de invierno están en su fase final, los comerciantes empezaron a colocar la ropa y el calzado de la nueva temporada, y ya comenzó a notarse la fuerte alza en los precios de ropa femenina y masculina. A diferencia de otros años, las subas prometen hacer temblar los bolsillos de los sanjuaninos con incrementos que trepan hasta el 40%, encabezados por el calzado para dama y la ropa de niños, según los datos aportados a este diario desde 14 negocios del Gran San Juan y la Cámara de Comercio.
El argumento que sostiene estos porcentajes de aumentos -a decir de los empresarios- radica en como treparon los costos de producción y por ejemplo el excesivo proteccionismo que tiene el sector textil nacional, que casi carece de competidores importados y es dominador absoluto del mercado argentino, ingrediente que ahora es mirado de reojo por las autoridades nacionales, en virtud que fue en la última década un sector protegido y ahora es el motor de la inflación en este sector del consumo.
‘’Lamentablemente está bastante caro lo primero que asoma de la nueva temporada. Además nuestros proveedores nos dicen que falta cuero y eso va, inevitablemente, a impactar en el precio de todo el calzado, ya se habla del 30%, por lo menos. Muchas veces los negocios absorbemos parte del incremento para que no decaigan las ventas y, así y todo, se encarece’’, explicó Angélica, del local Calzados Alaníz. ‘’A veces los arranques de temporada son con precios muy altos y después se acomodan. Ya en el mes de septiembre, octubre tal vez, se van a ver los precios definitivos y ahí estará más claro el escenario’’, agregaron desde tiendas Batistella. En tanto que desde el local céntrico de Trigal, que comercializa -principalmente- ropa para niños, Myriam comentó que ‘’lo nuevo viene con un aumento del 25% y todavía falta que llegue el grueso de la temporada’’.
‘’No debería haber precios tan altos porque las fábricas no están pasando su mejor momento. Las ventas en todo el país han caído y San Juan tuvo meses mejores y otros no tanto este año, por eso hay que dejar que los nuevos precios se acomoden porque, al fin y al cabo, todos necesitan vender’’, concluyó Hermes Rodríguez, presidente de la Cámara de Comercio de San Juan.
Por lo general, los comerciantes locales le ponen más fichas a las ventas de la campaña primavera-verano que a la de otoño-invierno, por ser San Juan una provincia con casi 8 meses de temperaturas altas. En este sentido, la indumentaria veraniega pasa más tiempo en las estanterías hasta que empiecen a liquidarla.
‘’Se estira la chance de explotar la rentabilidad. Otro es el panorama en invierno, que si no hace frío la tenés que rematar porque necesitas hacerte de dinero’’, reconoció por lo bajo un encumbrado empresario que tiene su negocio sobre peatonal Rivadavia.
