En la presente edición de ArteBA -una de las más importantes ferias de arte contemporáneo en la que se promueve la participación de la producción artística en Latinoamérica- San Juan hace presencia con el stand institucional del Museo de Bellas Artes Franklin Rawson, entidad que ya adquirió dos obras para su colección y recibirá una tercera donada por uno de los autores de las piezas.
La directora del MBA/FR, Virginia Agote, informó a DIARIO DE CUYO cómo fueron las elecciones y las compras de los dos cuadros, muy diferentes entre sí y que apuntan a una línea distintiva en el museo.
"Vamos a tener una obra exquisita de Alfredo Hlito, Dos efigies con zócalo. Él fue un artista maravilloso, hoy por hoy muy reconocido no solamente por representar el período del arte concreto en los ’50-’60, sino que artistas contemporáneos se basan mucho en sus obras, desde fines de los ’80", contó Agote.
Acrílico sobre tela en tonos marrones y negros, de 30×40 centímetros, data de 1985 y fue adquirida a la Galería Teresa Anchorena. A través de esta expresión el autor aludió a una abstracción que, mediante el empleo de formas geométricas y el análisis de los elementos plásticos, descartó toda referencia a un modelo, para proponer un sistema objetivo de composición y no representar a ningún objeto.
Alfredo Hlito, quien falleció en 1993, fue miembro cofundador de la Asociación Arte Concreto-Invención en Argentina. La obra de su autoría que adquirió el Franklin Rawson se formalizó a partir del Programa Matching-Funds, este año con el apoyo de Telefe, que eligió a tres museos (el sanjuanino, el MALBA y el de Bellas Artes de Neuquén) para aportarles $30.000 y colaborar en la financiación de las compras, con el requisito que las contrapartes igualen o superen dicha suma.
"Fue una muy buena elección y hasta pudimos tener fondos para incorporar a nuestra colección a un artista joven, de 22 años, todavía accesible pero que ya va a despegar económicamente, Santiago Villamayor, quien ya ganó el premio nacional de Rosario", expresó Agote. La nueva pieza es una pintura inmensa, de 4 x 3 metros, realizada en técnica mixta sobre arpillera, sin título; que se adquirió siguiendo la idea del museo de abrir nuevas posibilidades y tendencias artísticas en la institución. Villamayor quedó tan agradecido con el MBAFR que se comprometió a donar un grabado al Museo. Y cabe aclarar que aunque sean artistas de reconocimiento incipiente, en Arte BA una pieza accesible parte de los 10 o 15 mil pesos.
En esta vigésima segunda edición de ArteBA en la que participan 82 galerías provenientes de Latinoamérica, Estados Unidos y Europa, el Franklin Rawson cuenta con su stand, minimalista y tecnológico, que invita a conocer al museo de manera interactiva. Un inmenso plasma que muestra una serie de imágenes panorámicas en 3D de las distintas salas de la entidad, su fachada y la arquitectura del edificio, sumado a monitores touchscreen en los que a través de un programa interactivo y didáctico para chicos y jóvenes en base a obras de la colección del museo, se arman y desarman rompecabezas; además de tablets disponibles al público para que ingrese virtualmente al Museo, lo recorra, vea los detalles de cada obra y las agrande a su gusto.
El toque artístico y de gran originalidad es que cada visitante, mientras disfruta de la tecnología aplicada al museo, puede hacerlo sentado, en unos puffs reciclados cuyo tapizado son banners que utilizó la entidad en distintas exposiciones locales.
