A dos semanas de la misteriosa desaparición del caucetero Adolfo Ramón "Gogó" Ruíz y, apremiados por la falta de pistas ciertas, el Gobierno puso una recompensa de 100.000 pesos para aquel que aporte datos fehacientes que permitan esclarecer el caso. Aunque una comisión policial viajó ayer fuera de la provincia siguiendo una hipótesis y continúan los rastrillajes, en la fuerza reconocieron que hay desconcierto. Su familia aseguró que están "desesperados".

La resolución del Ministerio de Gobierno fue oficializada ayer a través del boletín oficial. Es la segunda vez que ponen precio para poder llegar a la verdad en una causa judicial: ya lo hicieron en el caso Raúl Tellechea, cuando a 50 días de su desaparición ofrecieron 20.000 pesos. Al cumplirse un año, la recompensa ascendió a 100.000 pesos, pero hasta hoy de nada sirvió.

El desaparición de Adolfo Ramón Ruíz (51) empezó a preocupar al Gobierno y "no quieren otro caso Tellechea", reconoció un alto jefe policial. De ahí que, ante la complejidad del caso, en la primera semana nomás hayan salido decenas de policías a hacer rastrillajes y hasta dieran intervención a Homicidios de la Brigada. Ahora, a solo 14 días, se suma este ofrecimiento de dinero para poder dar con este empleado de Dirección de Arquitectura y dueño de una pequeña empresa de transporte Caucete, del que no se tienen rastros desde el 24 de septiembre último.

La recompensa fue establecida por la Ley 7986 en mayo del 2009, en la que establece que el monto será fijado atendiendo a la conmoción pública del caso, a la peligrosidad del autor, a su complejidad y por las dificultades para la obtención de información útil. En uno de sus artículos indica que la identidad de la persona que aporte los datos será mantenida en secreto durante y después del proceso; no obstante podrá ser citado como testigo.

En este caso, el decreto de gobierno señala expresamente que la recompensa es para quienes "aporten datos, informes o elementos serios, fehacientes, precisos y concordantes que conduzcan en forma decisiva al esclarecimiento de la desaparición del señor Adolfo Ramón Ruíz". También se menciona que deberán dirigirse al juez Enrique De La Torre, a cargo del Primer Juzgado Correccional, al fiscal en turno o la Jefatura de Policía.

El propio juez De La Torre comentó ayer que "se están haciendo todas las diligencias para dar con el paradero de este hombre, pero no hay pistas por ahora. Es muy extraño, es la primera vez que tengo un caso de estas características". Los policías no saben en qué dirección tomar. Y es que la desaparición de Adolfo Ruíz es misteriosa por donde lo miren. El 24 de septiembre a las 20:30 salió del consultorio de su odontóloga, en el centro de Caucete, y nadie más lo volvió a ver. Eso fue dos días antes de su cumpleaños. Andaba con poco dinero y no se llevó ropa ni su documento. No tenía problemas económico y tampoco andaba deprimido. Investigaron su vida privada y familiar, pero no surgió nada extraño. Ayer, un grupo de policías viajó a otra provincia tras la pista surgida de posible amante, aunque no había muchas expectativas.