Ya en el vivac de Iquique, debido a que completó la octava etapa del rally Dakar 2015 para las motos, Alberto Ontiveros confesaba que hubo un momento en el recorrido que llegó a pensar: ‘¿Que estoy haciendo acá y no estoy en mi casa?‘. Si en el inicio de la primera etapa maratón para las motos sufrió mucho frío y corrió casi todo el tiempo con la indumentaria mojada por la lluvia y granizo que tuvo que soportar, ayer el regreso de Uyuni a Iquique fue más duro todavía.

Pero el ‘Puchi‘ no sólo pudo superarlos sino que logró lo que es hasta ahora su mejor actuación en una etapa de las ocho que disputó, al finalizar en el puesto 44 de la especial, con un tiempo de 4 horas 12 minutos y 19 segundos.

Esto le permitió al sanjuanino trepar 16 puestos en la clasificación general, ubicándose ahora 49no, con un tiempo total de 41 horas 10 minutos y 38 segundos.

Así, el único sanjuanino que completó el recorrido de la pasada edición y el que sigue en carrera en esta competencia se encuentra en la misma posición en la que finalizó el año pasado, por lo que está en condiciones también de mejorar su resultado deportivo.

Para llegar a esta situación, ‘Puchi‘ señaló que tuvo que soportar unas condiciones extremas: ‘Cuando partimos, la sensación térmica era de seis grados bajo cero. Luego el viento y la lluvia hicieron que todo el tiempo el frío fuera prácticamente insoportable. En un momento paré y le cambié a un espectador un cuellito para el sol por unos guantes para abrigar más las manos‘.

El centenar de kilómetros en el Salar de Uyuni también aportó una cuota importante para el calvario. ‘Lo que vivíamos era imprevisto para todos los pilotos. ¿Sabés lo que es pasar por un salar que en algunas partes tenía hasta un metro de agua?‘, resaltó.

El tipo de suelo también fue pasando factura. ‘La sal que se fue acumulando en la moto trajo distintos problemas. Los frenos fueron los que más se afectaron. Y también taparon el radiador. Gracias a Dios me di cuenta temprano que la moto estaba empezando a levantar temperatura y paré. Pedía agua y con ella lavaba para quitar la sal. Quienes no se dieron cuenta a tiempo perdieron mucho tiempo e incluso abandonaron‘, detalló el piloto.

El funcionamiento de la Beta #61 permitió que Ontiveros pudiera completar el recorrido sin perder mucho tiempo. ‘Espero que el frío no me afecte en lo físico. Ahora me siento bien y espero que siga así por todo lo que falta‘, concluyó.