El presidente de Aerolíneas Argentinas (AA), Mariano Recalde anunció ayer un "severo plan de ajuste" en la empresa de bandera nacional lo que pone en evidencia el millonario déficit de la compañía.
"El problema de la compañía no está en lo que gasta sino en los ingresos", intentó explicar Recalde al detallar el plan.
"Hemos decidido un programa de transición para mejorar la calidad del producto en puntualidad y regularidad y vamos a adoptar un plan severo de ahorro de costos", informó el titular de la empresa, tras reconocer que el déficit del mes de junio ascendió a 60 millones de dólares.
Recalde anticipó en ese sentido "una reducción de las horas extras del personal y un programa transparente de compras de material aeronáutico". "Vamos a deshacernos de una flota de 15 aviones (13 Boeing 737-200 y dos Airbus) que no vuelan desde hace varios años y a vender nueve aviones propios fuera de servicio, que generan costos de seguros, de estacionamiento y de seguridad", acotó. "Son naves embargadas, pero ya acordamos con la Justicia para que la venta se realice y que el producido de ella vaya a la cuenta de cancelación".
Sobre los aviones alquilados, Recalde expresó que le cuestan a AA, 1 millón 180 mil dólares por mes, más 35.800 euros de reserva de mantenimiento. "Hemos iniciado la renegociación con las empresas de leassing para deshacernos de las naves, que no vuelan desde hace dos años algunas y otras desde hace cuatro", destacó el titular de la compañía.
Consultado sobre la suma que se ahorraría con el "plan severo", el presidente de la principal aerolínea del país respondió que "aún no tenemos estimado el monto de la reducción del gasto, pero va a ser significativo". Además señaló que el déficit se debe "a la baja del turismo internacional, que afectó a todas las compañías aerocomerciales del mundo, a la gripe porcina y la campaña de desprestigio que afectó a la empresa cuando insisten en que somos impuntuales".
