El Negro Otiñano es un tipo de pocas palabras, pero a veces… porque hay otras en las que no se lo puede parar. Como cuando se sentó frente a las chicas del preseleccionado argentino de hockey sobre patines, a las que dirige, en una charla previa a uno de los entrenamientos y las tuvo casi una hora escuchando su monólogo. Y al Negro lo "ayudaba" otro -el profe Carlos Mercado- en esto de hablar con las pibas que, sentadas, escuchaban atentamente, opinaban cuando era necesario y, sobre todo, disfrutaban del solcito siestero en la cancha de Concepción. "Es que lo tenía que hacer. Desde que empezamos, no teníamos una charla a fondo. Arreglamos muchas cosas. Se habló sobre reglamento y cómo nos vamos a manejar. Este es un grupo maravilloso. Lo que ha quedado es lo mejor que hay en el hockey argentino. Todas son referentes. Sólo faltan Laura Táñez y Daniela Guerrero, dos chicas que, por cuestiones laborales, no podrán estar en la Selección".
El Negro Jorge Otiñano trabaja con al profesor Carlos Mercado y a un ayudante de éste -Walter Varas- y, juntos, le meten firme pensando en el Campeonato Mundial que se jugará en Alcobendas (España), a fines de septiembre. Actualmente entrenan 14 jugadoras, y de ese grupo deben salir cuatro (una arquera y tres de campo) para que quede conformado el equipo que irá al Mundial.
No hay secretos sobre los potenciales adversarios en la lucha por el título. España, por ser local y también el actual campeón del mundo, es el máximo candidato. Alemania y Portugal serán durísimos, pensando en el progreso del primero y la calidad tradicional del segundo. "No le tenemos miedo a nadie. Sólo respeto, en especial a España. Allá trabajan de otra manera. Fijate, por ejemplo, en el equipo del Vontregá juegan ocho de las que están en la selección. Hicieron juntas toda la Liga de este año. Se conocen de memoria".
Sobre el trabajo que realizan todos los días a doble turno, el técnico aclaró que "estamos buscando el equilibrio físico ideal. Así seguiremos hasta el momento del viaje. ¿Si sé cuándo será? En las cuestiones organizativas no me meto. No me corresponde. Yo trabajo en lo mío de la mejor manera posible y punto".