El Ministerio de Agroindustria de la Nación en forma conjunta con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), a través de su Centro Regional Mendoza-San Juan, acaba de presentar una guía de prospectiva para el ordenamiento territorial rural en todo el país a nivel municipal.
El objetivo de es motivar y sensibilizar a los tomadores de decisiones de los municipios a incorporar la dimensión de futuro de los territorios. Se considera muy importante que el territorio se planifique y gestiones sobre la base de una reflexión profunda del futuro deseado por sus gobernantes y ciudadanos. La prospectiva es el conjunto de análisis y estudios sobre las condiciones técnicas, científicas, económicas y sociales de la realidad futura con el fin de anticiparse en el presente. Es por ello que en este trabajo se presentan estrategias conceptuales y metodológicas para abordar estudios de prospectiva en el marco de los procesos de Ordenamiento Territorial Rural (OTR), tomando como base las experiencias y aprendizajes de Mendoza. En todo momento sus autores, los licenciados Javier Vitale; María Barrientos y Silvina Papagno y la ingeniera agrónoma Carla Pascale Medina, aclaran que la guía no proporciona recetas o pasos a seguir para incorporar la dimensión prospectiva en OTR, sino que comparte lineamientos generales y recomendaciones para aplicar la prospectiva territorial participativa.
Los procesos de ordenamiento del territorio son complejos y tienen que ver con regularización de tenencia y propiedad de la tierra, lo que introduce asuntos redistributivos y una faz política y de poder. Los tiempos que normalmente toman son largos, por lo que el esfuerzo debe ser persistente y con un enfoque de largo plazo.
En el país se están desarrollado iniciativas de planificación estratégica gubernamental en el espacio territorial y en sectores como agroalimentos y agroindustria; ciencia, tecnología e innovación; turismo e industria, que muestran el interés de la planificación y la política pública de apuntar al largo plazo.
Que los municipios trabajen en el ordenamiento territorial, como lo hizo Pocito y lo están haciendo, actualmente, Albardón y Santa Lucía, es de fundamental importancia y resulta muy positivo. Más si es ordenamiento territorial rural y si aborda la visión de la prospectiva, o de largo plazo.