El bloqueo de Gustavo Molina desató otra vez la locura. UPCN se graduó de cuco para el Vivo Minas y extendió su era gloriosa, firme candidata a la más significativa para la historia de los clubes argentinos de vóleibol.
Tras un duelo de presión asfixiante con el dueño de casa, el elenco sanjuanino venció 3-2 y clasificó a la final del Campeonato Sudamericano de Clubes, donde se enfrentará hoy, desde las 20,30 al gran candidato, Sada Cruzeiro, que en primer turno superó sin sobresaltos a Boca.
Pero más allá del partido de hoy, UPCN ya tiene un motivo más que importante para festejar. Es que Sada Cruzeiro es el organizador y actual campeón del Mundial de Clubes, que se disputará en mayo próximo, por lo que el partido entre UPCN y Vivo Minas definía nada menos al equipo que ocupará la plaza representante de Sudamérica.
No importa que suceda hoy, UPCN regresará nuevamente al Mundial de Clubes, donde finalizó en la cuarta posición en la pasada edición.
Dicen que la historia no se repite, pero sí sucede con las hazañas de UPCN.
Los héroes dirigidos por Fabián Armoa fueron Demian González, Theo Lopes, Martín Ramos, Junior, Bogdan Olteanu, Javier Filardi, Sebastián Garrocq, Gustavo Molina, Rodrigo Peres Lopes, Sebastián Fernández, Lucas Tell y Nicolás Lazo.
El equipo que se supera constantemente a sí mismo, ayer volvió a hacer historia. Es que Vivo Minas también organizó el Sudamericano del año pasado y el equipo sanjuanino le ganó en la final por 3-0.
Ayer, el anfitrión tenía la oportunidad de cerrar esa herida, y otra vez ante su público. Pero Los Cóndores volvieron a elevarse a un nivel superlativo, en base a una confianza inquebrantable
en sus cualidades.
No importó que en al recta final del primer set Minas pisara el acelerador y ganase 25-22 tras un 21 iguales. Porque UPCN logró escaparse en el segundo set (14-10) y llevar esa brecha hasta el 25-22 que igualaba el tanteador de sets.
UPCN pasó a ganar 2-1 tras un maratónico tercer set por 32-30, luego de levantar 7 pelotas a favor del dueño de casa para quedarse con ese triunfo.
Vivo Minas reaccionó y ganó 25-21 el cuarto. Como el viernes ante Boca, UPCN jugaba otra vez un tie break. Que fue punto por punto, con el local la mayor parte del tiempo arriba. Pero UPCN, con Theo Lopes, sacó primero una diferencia de 2 (13-11), que a esa altura era agua en el desierto. Descontó Minas pero dejó la pelota en la red en el saque. Era la primer oportunidad de cerrar la historia y Molina llegó con el bloqueo.
El profe Lardone lloraba como un chico. González levantaba a Armoa. Filardi se abrazaba con todos. UPCN vuelve a estar en la final del Sudamericano, aunque el festejo era porque es el primer equipo argentino en participar en dos ediciones del Mundial de Clubes. Por lo pronto, hoy tiene una final.