Por enésima vez, la misma cantidad de ladrones, la misma maniobra y la misma víctima elegida para comenzar un golpe: atacar a empleadas domésticas o a los propios dueños de casa cuando salen a la calle a limpiar para después ingresar a las viviendas. Ayer en la mañana, el blanco fue un estudio contable de Concepción, en Capital, y el asalto fue un calco de varios que se registraron últimamente en la provincia (ver Tres antecedentes…).

Ayer, dos delincuentes armados y a cara descubierta, sorprendieron a una empleada que pasaba el lampazo en la vereda de Alem y Pedro Ecchagüe, en Capital. Después de reducirla, enfilaron hacia el interior del estudio y encañonaron a dos socias de la propietaria. Los malvivientes encerraron a las tres mujeres en una habitación y luego de revisar el local, huyeron con 850 pesos, una notebook, dos celulares, joyas de las víctimas, una filmadora, una cámara de fotos y una colección de monedas antiguas, señaló Lucy Dorgan de Montilla, dueña del estudio asaltado. Tras media hora, las mujeres pudieron escapar y pedir auxilio a la policía.

Según Silvia Carrizo, la empleada atacada, eran las 9 cuando salió a pasar el lampazo en la vereda de la casa donde funciona el estudio contable "Lucy Dorgan y Asociados". A esa hora, dos ladrones aprovecharon el descuido de la empleada cuando se metió al garaje de la vivienda a dejar el lampazo. "Los vi y no pensé que me iban a asaltar. Cuando ingresaba al garaje, uno me puso un arma en la espalda y el otro me salió por el costado. Lo primero que me dijeron es que si estaba sola y les dije que no. Decían que se trataba de un ajuste de cuentas", relató Carrizo.

Desde allí, los ladrones ingresaron con la empleada al estudio. Ahí se encontraban Valeria Araya y Ana María Alba Valverde, socias de Dorgan, según la policía.

Los delincuentes encerraron a las mujeres y les quitaron las carteras. Luego revisaron la casa y escaparon con los aparatos, las monedas y algo de dinero, aseguró Lucy Dorgan.

Tras la huida de los asaltantes, una de las mujeres escapó por una ventana y le avisó del atraco a su marido y a la policía.

"Es injusto lo que pasa en San Juan. Esto me destruye la vida y hay un estado que sigue premiando la inseguridad. Este es el país que tenemos y no puede ser", relató indignada la dueña del estudio contable.