No hay caso para este San Martín. Cada salida le cuesta demasiado poder desarrollar su juego y por ende ganar sigue siendo un anhelo al que le faltan sustentos para lograrlo. Le viene sucediendo y anoche en Córdoba volvió a quedarse sin nada, porque cayó 1-0 ante Talleres y en la que va del torneo nunca pudo llevarse los 3 puntos para San Juan.

Se destaca que levantó su rendimiento con referencia a las anteriores salidas, porque a diferencia de las anteriores no se cayó en el segundo tiempo, sino que terminó mejor parado y empujando para poder llevarse algo del estadio Mario Kempes, pero no llegó a gravitar en el área y generar peligro. Mientras que el oficio de Talleres, que no fue mucho más que el Verdinegro, se quedó con la victoria con el gol de Vega a los 30’ del complemento, justo en el mejor momento del equipo de Garnero.

El dominio y la presión comenzó siendo de San Martín con Ledesma y Quiroga, dándole juego con Bogado y buscando llegar con López, quien a los 2’ ya probó al arco. No obstante, fue perdiendo precisión y Talleres se animó, a los 10’ y tras un lateral ofensivo la dejaron picar y Klusener cabeceó, y en la siguiente Sánchez Sotelo remató de afuera del área.

El conjunto cordobés creció, le quitó la pelota al Verdinegro que tuvo un poco de oxigenación cuando la tomó Salas o Bogado. El conjunto de Sialle era más, pero sus puntas no podían darse vuelta para rematar. Sobre los 31’, Bogado la sacó sobre la línea tras un tiro de esquina de la T y 60 segundos después Ardente se jugó la pilcha y lo atoró a Klusener. San Martín no podía salir del agobio, ante un Talleres que jugaba en campo sanjuanino pero sin efectividad.

Pero a la vuelta del entretiempo, el elenco sanjuanino fue más. Arrancó con un cabezazo de Burgos que Ardente contuvo pegada al palo y un derechazo de Sánchez Sotelo que dio en el travesaño. Pero fue sólo eso, ya que San Martín pasó a adueñarse de las acciones en base al juego de Bogado. Por eso a los 14’ tuvo el primer grito tras el centro, la bajó Ledesma pero el movedizo Pablo Pérez no llegó a darle. No obstante, en el mejor momento de San Martín, cuando había encontrado la pelota y arrinconado al Matador, sobre los 30’ cayó el centro al área sanjuanina, Klusener la bajó de cabeza y Marcelo Vega lo fusiló a Ardente para por el 1-0. Un golpe inesperado hasta para el local, que buscaba hacerse fuerte en el medio para frenar a San Martín, que pese al gol no bajó su intensidad, la doblego con el ingreso del Gurí García para jugarse al todo, aunque esa urgencia lo nubló y ante un rival que se metió atrás, cuidó el tanto de ventaja, no lo dejó ninguna oportunidad al Verdinegro que vio como otro partido de visitante se le fue en otro traspié lejos de casa.