El filipino Manny Pacquiao recuperó antenoche el título welter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), al derrotar por puntos en 12 rounds en fallo unánime al local Timothy Bradley, en una pelea revancha disputada en el MGM Grand Arena Garden de Las Vegas. El filipino se tomó revancha de la pelea que sostuvieron en ese mismo escenario el 9 de junio de 2012 cuando el californiano le arrebató el cinturón welter OMB, en un polémico fallo mayoritario de tono ‘localista‘.
El jurado vio ganar a Pacquiao con los siguientes guarismos: Craig Metcalfe (Canadá) y Michael Pernick (Estados Unidos) puntuaron 116-112, mientras que el también estadounidense Glenn Trowbridge dio 118-110.
Pacquiao fue un ganador legítimo en un pleito que en su mayor parte lo tuvo como dominador ante un rival que optó por contragolpear, una táctica que no le dio buen resultado por la velocidad en los desplazamientos y efectividad de los golpes del boxeador asiático.
A pesar de que en los primeros asaltos los golpes de Pacquiao no conmovieron al norteamericano, a partir del séptimo le hizo sentir el rigor de sus manos que impactaron con combinaciones de cruzados, ganchos al cuerpo y ascendentes al mentón. “Bradley es un gran luchador que incluso me conectó buenos golpes y me hizo marear. Pero lo importante es que seguí mi plan de pelea y gané el combate claramente”, destacó el zurdo.
Pacquiao (56-5-2/ 38 ko), oriundo de General Santos City y de 35 años, no logra ganar por la vía rápida desde 2009, cuando derrotó por nocaut en 12 rounds al puertorriqueño Miguel Cotto.
En otra pelea mundialista, el ruso Khabid Allakhverdiev resignó la corona interina ligero de la AMB, ante el estadounidense de ascendencia mexicana, Jessie Vargas, que lo derrotó en una decisión unánime (115-113 dos tarjetas y 117-111) en 12 vueltas.