La explosión de un gasoducto de la empresa Ecogas ocurrido en la madrugada de ayer en el barrio Ituzaingó Anexo, de la ciudad de Córdoba, causó pánico entre los vecinos del sector, pero no se registraron heridos, ni daños materiales en viviendas, aunque unas 400 personas se autoevacuaron.
El hecho se registró en una zona descampada del barrio, ubicado en el sector sudeste de la capital cordobesa en el camino a Capilla de los Remedios y próximo a la Refinería del Centro.
Los vecinos del sector, que en su mayoría dormían a esa hora, fueron sacudidos por una violenta explosión seguida por una gran llamarada de unos 40 metros de altura, aunque para algunos testigos superaba los 100, en la zona por donde pasa un gasoducto de la empresa Ecogas.
El director de bomberos de Córdoba, comisario mayor Gustavo Folli, dijo en declaraciones a la radio Cadena 3 que los bomberos habían alertado a la empresa Ecogas para que cortara el pasaje de gas hacia la cañería dañada.
Testigos que se comunicaron con la emisora confirmaron que la gran llama vertical alcanzaba decenas de metros, algunos dijeron que superaba los 100 metros e "iluminan todo el cielo en el barrio", que desde varias cuadras se veía rojo. "La fábrica quedó de día", dijo uno de ellos.
La gigantesca antorcha era visible desde puntos elevados a decenas de kilómetros del lugar, sobresaliendo del horizonte urbano marcado por el entramado del alumbrado público.
Los testigos más próximos reportaron el temor del vecindario por la eventual propagación del fuego o la posibilidad de más explosiones, a lo que cargaba de dramatismo el bramido "de turbina de avión" de la combustión de semejante flujo de gas.
Alertados por las llamadas telefónicas fueron al lugar cinco dotaciones de bomberos y comenzaron a combatir el fuego, que pudieron extinguir pasadas las 3 de la madrugada.
