El canciller de Argentina, Héctor Timerman, y su par uruguayo, Luis Almagro, acordaron ayer volver a reunirse "en 48 horas" para avanzar en la propuesta de monitoreo conjunto, con el objetivo de destrabar el conflicto bilateral causado por la papelera UPM (ex Botnia).
Según informaron a DyN fuentes de Cancillería, los cancilleres resolvieron "seguir avanzando en puntos específicos de la propuesta de monitoreo conjunto y continuo". Esa iniciativa estará "basada" en el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya y en el Acuerdo de Anchorena, celebrado el 2 de junio último en Uruguay entre los presidentes Cristina Fernández y José Mujica, agregaron. Minutos antes de las 10, Timerman y el vicecanciller Alberto D’Alotto recibieron en el Palacio San Martín a Almagro y a los embajadores Francisco Bustillo y Julio Baráibar.
Mientras Timerman y Almagro compartieron un "almuerzo de trabajo", los equipos técnicos de ambos países "pasaron en limpio" las propuestas para acelerar el monitoreo conjunto del río Uruguay y de la planta de celulosa.
Desde la República del Oriental se informó en su página web que los cancilleres acordaron "un período de 48 horas para reflexionar sobre las propuestas presentadas". Por su parte y antes de llegar a Argentina Almagro afirmó que su gobierno quiere alcanzar un "preacuerdo" para sellar el diferendo bilateral "de la mejor manera posible". La última visita del canciller uruguayo se realizó en forma reservada a principios de julio, ocasión en que le entregó a su par argentino la "contrapropuesta" para el control ambiental.
