El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) dio a conocer algunos consejos para un consumo de frutos de mar sin consecuencias. Entre las recomendaciones está al de evitar comprar productos de “elaboración casera y/o artesanal”, que no estén registrados y autorizados. El pescado enfriado debe tener: las branquias rojas, las escamas bien adheridas al cuerpo y brillantes, y su carne debe ser firme, que no ceda a la presión del dedo. Puede conservarse de 1 a 2 días en heladera (en la parte más fría), y hasta tres meses en freezer. Si los ojos están opacos o hundidos es signo de deterioro, salvo en la Lisa y en el Dorado. Los camarones y langostinos deben presentar un color amarronado-violáceo traslucido en caso de estar crudo o rojo intenso cuando se lo vende cocido. No se deben comprar si tienen manchas negras, olor feo o desprendimiento entre cabeza y tronco. Los calamares deben tener la piel lisa, suave y húmeda sin manchas sanguinolentas o extrañas a la especie. Las latas de conserva de productos pesqueros no deben presentar abolladuras, ni estar hinchadas, ni oxidadas.
