Llegado hace un par de meses para reforzar al equipo, el colombiano Camilo Mendoza, logró ayer un segundo puesto que hizo explotar de emoción a todos los integrantes del equipo "Jácamo Refrigeración". "Estoy muy contento porque pude darle una alegría a esta linda gente que me hace sentir como en mi casa en Bogotá", dijo mientras recibía cálidos abrazos de sus compañeros y de los allegados al conjunto.
"Me sentí muy bien en el alto de la Quebrada de las Burras, venía de atrás y cuando alcancé al pelotón lo pasé de largo aprovechando la bajada", explicó con mucha tranquilidad quien el sábado no tuvo la fortuna de "enganchar" el corte que seleccionó al pelotón y entró a 24 minutos del ganador de la primera etapa, y finalmente dueño de la general de la carrera, Gerardo Tivani.
"La carrera fue muy linda, me encantó. Sufrí bastante el sábado con el viento, pero fue una competencia muy exigente e interesante", contó Mendoza que ya en la Doble Chepes había andado escapado bastante tiempo.
La satisfacción del segundo puesto logrado por "su muchacho" llenó de lágrimas los ojos de Juan Jácamo, quien no paraba de acariciarle la cabeza y le besaba la frente de la emoción. "Usted sabe bien el sacrificio que hacemos para poner en la ruta a nuestro equipo, por eso para nosotros esto es una victoria. No cualquiera puede festejar un segundo puesto en una etapa de una clásica tan grande como la Calingasta", repetía quien desde la camioneta quedó ronco de tanto alentar a su ciclista.
