Buenos Aires.- Al igual que en la Tragedia de Cromañón, en la Time Warp había mucha más gente que la que estaba permitida. Así lo difundió el juez Casanello que lleva a cargo la investigación de lo que ocurrió en la noche del viernes pasado donde murieron cinco jóvenes por intoxicación.
El lugar estaba habilitado para 13 mil personas, pero sin embargo fueron 20.490 los asistentes. Sumado a que en los baños no había agua y las ambulancias privadas eran pocas, la situación se volvió un verdadero caos.
Así lo señaló una escribana contratada por Dell Producciones.‘Una mujer corría para todos lados con una jeringa y decía que era la última dosis que quedaba y que había que pedir más’, señaló y demostró que en la enfermería estaban totalmente saturados por la cantidad de chicos que necesitaban asistencia.
Además, recordó que cuando ingresó a ese sector, los médicos estaban atendiendo a dos jóvenes tirados sobre unas tablas de traslado, que estaban haciendo masajes cardíacos y maniobras de resucitación. Se turnaban entre los médicos y gritaban ‘no pares, no pares’.
En tanto, otros asistentes que declararon la semana pasada, dijeron haber visto algunos de los guardias de seguridad privada y a custodios fumando marihuana y ‘duros como roca’. Los testigos indicaron que agentes de Prefectura Naval veían, sin actuar, como personas se drogaban y fumaban marihuana.
Una de las médicas contratadas también relató el horror: ‘estábamos saturados por la cantidad de jóvenes descompensados que empezaron a llegar’, aseguró.
‘Hasta las 1:50 atendimos emergencias moderadas o leves, nada grave’, explicó.Pero a los pocos minutos, ingresó un paciente con un ‘traumatismo encefalocraneano y es derivado a la primera ambulancia’. ‘Al vernos saturados y sin ambulancias pedimos auxilio al SAME’, dijo.
En tanto, Martín Gontad,conocido como ‘el rey de las fiestas electrónicas’, sobre quien pesa un pedido de indagatoria por lo que pasó en la Time Warp, sostuvo que no vio ‘nada fuera de lo común’ en Costa Salguero.
