Transportistas locales hicieron notar su descontento por los valores del impuesto a la patente del automotor. Aducen que esta situación se suma a los altos costos de los servicios logísticos de nuestro país y la competencia desleal de empresas foráneas que abastecen la minería local, están haciendo desaparecer la posibilidad de competir en el mercado nacional e internacional.