Si ganaba tenía medio pasaje a la próxima instancia, dependiendo de que Atenas empatara o perdiera. Pero el León volvió a fracasar en tierras ajenas, perdió 2-1 ante Luján en Mendoza y deberá trabajar todavía por la tan ansiada clasificación, cuando restan dos fechas. Los dos goles madrugadores de Luján, uno en cada etapa, fueron el principal puñal del que Trinidad nunca pudo revertirse. El domingo a las 20 el León recibirá a Policial, si gana por fin pasará una fecha antes a la próxima etapa.

No se terminaban de acomodar y Chávez a los 28 segundos clavó un golazo de afuera del área, después de una buena jugada individual, que nació desde el saque inicial. Trinidad se recuperó rápido con el gol de Sánchez, quien recibió una asistencia de Burgo, a los 9 minutos.

Desde ahí el partido fue parejo, pero al León le faltaron ideas para fabricar situaciones e inteligencia para controlar el juego. Entonces Luján creció, pero Castro y Chávez escaparon goles.

Al inicio del complemento otra vez Luján golpeó feo. A los 4´, Castro enganchó una pelota dentro del área y puso nuevamente arriba al equipo mendocino, que unos minutos después se quedó sin Modareli, expulsado. Pero Trinidad no reaccionó, encima Pastoriza vio la roja y todo se le complicó. Luján tuvo para liquidarlo, pero Sosa -la figura- lo impidió. Trinidad podía clasificar en Mendoza, pero los dos golpes madrugadores le postergaron el sueño.