Junto a Maximiliano Pascual, Sebastián Pereira es uno de los sobrevivientes que pasó todas las malarias en Atlético de la Juventud Alianza. Tiempos en los que faltaba de todo y en los que jugaban por no descender. Ahora, la contracara lo tiene en un inmejorable momento y Sebastián lo asume con calma pero con una inmensa alegría. Es palabra autorizada para hablar después de todas las amarguras que pasó porque clasificar dos fechas antes y ser líder de la Zona 5 tiene sus méritos.
"Yo creo que hay un doble mérito. Primero, la unión y la calidad del grupo. siempre tuvimos claro el objetivo y todos tiramos para el mismo lado. Lo otro, es la actitud. Nosotros, con errores o no, salimos siempre a dejar todo y eso suma en cualquier campaña", analizó Sebastián.
Haber clasificado los tranquilizó pero no los relajó. "No miramos más a futuro que no sea el próximo partido en Catamarca. Queremos terminar bien y arriba. Lógicamente que uno ya empieza a imaginar lo que será cruzarse con Estudiantes de Río Cuarto, en otra vidriera, con otro nivel. Pero estamos tranquilos y sabemos que no hemos ganado nada todavía".
Analizando a su equipo, Pereira sabe que hay cosas para mejorar y la apuesta todo al trabajo para lograrlo: "por ahí nos está faltando tener más seguridad con la pelota, jugar a dos toques, tener esa confianza. Eso te permite manejar los partidos con otros tiempos. Eso se puede lograr y se lo hace con mucho trabajo".
En la parte final, Sebastián no ocultó sus ilusiones para el futuro: "Hemos pasado toda la malaria que se pueda imaginar en la vida de un jugador. Desde viajar en autos particulares, llegar a la cancha y ni siquiera calentar. Por eso me gustaría que en esta ocasión, con todo lo bueno que está haciendo la dirigencia, se nos dé algo grande para la alegría de todos".
