Ibar Pérez Corradi, el empresario acusado por el triple crimen de General Rodríguez, clamó ayer su inocencia, pidió protección para él y su familia y aseguró que Sebastián Forza, uno de los asesinados en aquel hecho, le había dicho que ‘La Morsa‘, el misterioso personaje supuestamente involucrado en episodios criminales, era Aníbal Fernández, el ex jefe de Gabinete kirchnerista.

El exprófugo declaró por la tarde durante dos horas y media ante la jueza federal María Romilda Servini y el fiscal Juan Pedro Zoni en el edificio Centinela de Gendarmería, donde quedó alojado el martes luego de ser extraditado desde Paraguay.

Una fuente judicial relató a Télam que al comenzar la audiencia, a Pérez Corradi se le leyó la imputación que pesa en su contra y luego el acusado hizo una introducción de los temas sobre los que se iba a explayar.

Mientras hablaba, la jueza lo interrumpió y le preguntó directamente: ‘¿Usted sabe quién es ’La Morsa’‘?. ‘Sebastián Forza me dijo que ’La Morsa’ era Aníbal Fernández‘, le contestó el exempresario farmacéutico, que estaba acompañado por sus dos abogados, Carlos Broitman y Juan José Ribelli

Al exprófugo se le explicó que ‘la causa efedrina está llena de relatos y hacen faltan datos contrastables‘ y por eso se le pidieron algunas precisiones mientras declaraba.

En el marco de este expediente, Martín Lanatta (42), condenado a prisión perpetua por el triple crimen junto con su hermano Cristian (44) y Víctor Schillaci (36), declaró que ‘el negocio del tráfico de efedrina se lo termina quedando en la totalidad Aníbal Fernández con la gente de Inteligencia‘ y aseguró que le decían ‘La Morsa‘.

Lanatta también relató que conoció al ex jefe de Gabinete a través de Andrés Meiszner, quien estuvo a cargo del Registro Nacional de Armas hasta diciembre de 2011 y era quien recaudaba para ‘el uno‘ (Aníbal) con ‘los negocios paralelos‘ del organismo, entre ellos habilitaciones paralelas para la portación de armas.

Añadió que fue en ese marco que Forza (34) lo contactó para que le hiciera un ‘puente‘ con Fernández, por entonces ministro de Seguridad y Justicia, y que a cambio de 250.000 dólares, el funcionario aceptó ocuparse de los asuntos de quien luego fuera una de las tres víctimas. Fue entonces que comenzó, según Lanatta, el contacto de Aníbal con el tráfico de efedrina.

Algo similar declaró en el juicio por el triple crimen la esposa de Forza, Solange Bellone (38), que afirmó: ‘Mi marido dijo que había arreglado protección con ’la Morsa’ por doscientos cincuenta mil dólares. No sé quien es, pero me dijeron que era un hombre de bigotes‘. En la misma entrevista, el expolicía José Luis Salerno, exsocio de Damián Ferrón (37 otro de los asesinados). Afirmó que en ocasión de reunirse con Pérez Corradi le dijo ‘los tengo que boletear‘, en alusión a Forza, Ferrón y Leopoldo Bina (35).

En otro tramo de su declaración, Pérez Corradi se declaró ‘inocente‘ de los crímenes y dijo que tiene pruebas que va a ir presentando más adelante. Además, pidió ser incluido en el Programa Nacional de Testigos e Imputados Protegidos y protección para su familia en la Argentina, que lo visitó en su lugar de detención para llevarle ropa.

Luego de hablar entre las 13.30 y las 16, la declaración se suspendió por decisión de la jueza, ya que el exprófugo estaba ‘cansado por el viaje‘ desde Paraguay, y continuará hoy la tarde o el lunes. Según Broitman, su defendido ‘está aportando elementos de prueba y dando respuesta a todos los interrogantes‘ que le plantearon la jueza Servini y el fiscal Juan Pedro Zoni.