Cuando el partido terminó y la derrota de Peñaflor, la primera del torneo ya que acumulaba en la previa dos empates, su entrenador Huber Piozzi se retiró del campo de juego entre reproches hacia el comisario deportivo. Luego, el propio DT contó que era hacía la terna arbitral mendocina (encabezada por Sebastián Marquez) acusándolos que los perjudicó.
“Son unos energúmeno”, fue la frase con la que los definió. “Es complicado ganar en esta cancha (por la Villa), pero además de eso desde que llegás tenés que rabiar con estos árbitros que nos perjudican. siempre pasa lo mismo”, tiró.
“No puede ser que cuando estábamos por hacer un gol paró la jugada porque un perro se metió a la cancha, eso no lo tolero, son unos energúmenos”, agregó. “Además nosotros llegamos a la cancha y hace rato que ellos ya estaban y eso demuestra que ya habían hablado con la gente de la Villa Obrera”, cerró.
