La plaza frente a la Gobernación en Las Heras, Mendoza, a principios del siglo XIX era el punto de reunión de la gente y centro de comercialización de gran cantidad de productos o animales como ganado vacuno, ovino, caprino, frutas, semillas o bebidas. En sus alrededores había edificios de un solo piso, como la sede del Gobierno, comercios, hogares de las familias acomodadas, destacamentos militares y policiales y una iglesia.

Las casas medían 2,5 metros de altura. Habría faroles de aceite sobre las puertas de las casas. También bebederos para los animales, bancos totalmente de madera en la plaza, calles de tierra y poca vegetación. Las construcciones eran de tapiales con techos de palo y totora y pájaro bobo, porque no había mucha caña en el lugar.

Alrededor de la plaza vivían unas 20 familias pudientes entre comerciantes, funcionarios de Gobierno y terratenientes. La población del departamento de Las Heras desciende de familias españolas e italianas. Pero muchos tienen raíces huarpes e incas.