Según un estudio realizado por el Instituto Argentino de la Energía que preside Jorge Lapeña, la demanda de energía eléctrica y de combustibles líquidos empezó este año a revertir la tendencia decreciente que había mantenido después de la crisis financiera internacional y retomó la senda del crecimiento en forma acentuada. Añadió que “el período de calma que se instaló después de octubre de 2008 habría llegado a su fin, y las tensiones sobre el abastecimiento energético vuelven a instalarse en el escenario económico”. De acuerdo con el informe, la producción de petróleo de los doce meses acumulados a marzo último fue un 1,6% inferior a la del mismo período del año anterior. La extracción de gas natural, en tanto, acumuló en los doce meses una baja del 4,1% y sólo en marzo cayó un 6,1% con relación a igual período del año anterior. Según el IAE, la producción de gas bajó 117,8 millones de metros cúbicos en marzo, lo que equivale a 3,8 millones de metros cúbicos diarios menos. En tanto, Bolivia se comprometió ese mes a vender a la Argentina un máximo de 7,7 millones de metros cúbicos diarios y un mínimo de 5 millones, pero desde el 19 de este mes está enviando unos 4 millones.
