Los aficionados al fútbol están en otro planeta. En otro mundo. Metidos frente a un televisor mirando el Mundial. Y el fútbol local es prácticamente dejado de lado. Por eso la mayoría de las canchas locales lucen vacías. El poco público que asiste lleva la radio para "vivir" el mundial y el partido de su equipo pasa a segundo plano. Para colmo, muchos de los choques de la Copa del Mundo son transmitidos en la televisión por el canal de aire, es decir todos lo pueden ver. Como será que hasta en el camarín de los árbitros, algunos jueces tienen su radio de mano.
Los partidos del torneo Oficial comienzan a las 16 y el último del Mundial larga a las 15.30. Por eso, muchos prefieren quedarse en sus hogares mirando la atracción del momento. Lástima, queda de lado el fútbol nuestro. El de todos los días. El que hoy por hoy le da vida a los aficionados sanjuaninos, ya que todavía no comienza la Primera Nacional B (donde está San Martín), el Argentino A (en el que participa Desamparados) y el Argentino B (en el que están Del Bono, Alianza, Unión y Trinidad).
La única opción local está casi olvidada. Porque aquellos que sí van a ver los partidos llevan su radio de mano para seguir escuchando atentos los partidos del Mundial.
La semana pasada, Unión empató sin goles en su cancha con Colón. En la platea había gente con la radio y a un alto volumen escuchando el partido de Uruguay con Sudáfrica. Entonces, lo que se jugaba en la cancha Azul pasó a segundo plano y más todavía cuando Forlán metió el segundo gol charrúa. Todos enfocaron su atención en otra cosa y el juego de su equipo preferido quedó prácticamente en el olvido.
