Un raspón entre las cejas, golpes en el cuerpo y un puntazo en la canilla derecha. Esas fueron las lesiones que sufrió el martes en la noche Flavio Guerra (29 años, auxiliar de a bordo de colectivos, desempleado) luego de enfrentarse contra tres sujetos armados con puntas en la esquina de su casa de Rawson, contó el joven.

El mismo Guerra precisó que los agresores buscaban venganza, porque hace unos meses le dio una tremenda golpiza a un ladrón que intentó robarle su bicicleta mountain bike valuada en $3.000. El caso no pasó a mayores por suerte, y porque desde aquel intento de robo Guerra había comprado un elemento de defensa personal, un bastón extensible.

Aquel episodio ocurrió el mediodía del 10 de junio pasado, cuando volvía en bicicleta a su casa en Villa Krause, Rawson, luego de comprar un asado. Esa vez dejó su rodado en la puerta y cuando salió a buscarlo, dos ladrones intentaron robárselo. Y hubo una pelea que terminó con uno de los ladrones noqueado.

Entonces Guerra compró un bastón extensible ‘por seguridad‘. Ese dispositivo con una bola metálica en la punta, ahora lo lleva a todas partes en su mochila.

Este martes, a las 23.30, Guerra llegó a su casa luego de visitar a su pequeño hijo, en Capital. ‘Estuve un rato en mi casa y salí en la bici a repartir unas tarjetas, porque el domingo que viene es el primer cumpleaños de mi bebé. De paso, fui a comprar cigarrillos‘, explicó el muchacho.

Al regresar, tres sujetos en una moto lo estaban esperando en la esquina. Al verlos, Guerra se metió en un bolsillo el bastón y dejó su bicicleta a un costado. Uno de los sujetos se acercó y le dijo: ‘¿te acordás del pibe al que le pegaste?, yo soy el hermano‘.

Ahí, ese sujeto y el muchacho empezaron a discutir hasta que se agarraron a golpes. Su rival y un cómplice sacaron unas puntas y Guerra se arrinconó contra una pared, para evitar un ataque traicionero.

En medio de la pelea, uno de los cuchillazos le rozó la frente y cuando Guerra lanzó una patada a uno de sus atacantes, otro se la atajó de un puntazo, precisó.
Luego, el herido corrió a su casa y la pelea siguió allí, hasta que su madre llamó a otro de sus hijos y los ladrones huyeron al verlo llegar.

‘Lo único que quiero es tranquilidad. Tengo una criatura y solamente quiero disfrutarla. La verdad es que podría haber pasado algo peor‘, contó Guerra.