A pesar de los intentos, los adolescentes no pudieron esconder los copones de cerveza que hacía unos cinco minutos habían comprado en uno de los locales de comida. También intentaron esfumarse entre la gente, pero la estrategia tampoco sirvió para escapar de la mirada atenta de tres efectivos policiales que los seguían de cerca. Custodia que duró hasta que este grupo de amigos terminó la bebida y se ubicó frente al escenario para ver el espectáculo artístico. Y sin provocar ningún tipo de desorden. Esto sucedió en el predio de la exposición, donde la seguridad es uno de los temas prioritarios para garantizar el normal desarrollo de la Fiesta Nacional del Sol 2010.
"No porque se trate de una fiesta popular vamos a permitir que los menores consuman bebidas alcohólicas. Tampoco que haya desmanes o cualquier otro tipo de problema. La idea es que todos vivamos la fiesta en paz", dijo el comisario Carlos Castillo, uno de las responsables del operativo de la Policía montado en el Predio Ferial, quien destacó el trabajo de los 170 efectivos encargados de la seguridad tanto dentro como fuera de dicho lugar. El comisario contó que el grueso del operativo se desarrolla en el interior del predio, donde los agentes hacen rondas permanentes, en grupo de dos o tres, y comunicados entre sí. Explicó que están siempre en movimiento y que sólo se detienen ante la sospecha de alguna irregularidad. En estos casos pedirán la documentación personal y averiguarán los antecedentes de cada persona, agregó.
El operativo a cargo de la Policía de San Juan se complementa con el realizado por unos 100 agentes de seguridad privada. A diferencia de los efectivos policiales, los guardias de las agencias permanecen de a uno y ubicados en lugares estratégicos, especialmente entre los stands.
