Una creciente preocupación de especialistas se ha generado ante la gran cantidad de ballenas que aparecen muertas en las costas chubutenses. A tal punto ha llegado el caso, que la cantidad de estos cetáceos que llegan sin vida a la Península de Valdés se ha multiplicado por seis: mientras en 2004 llegaron 13 cadáveres a esas costas, el año anterior se encontraron 81 animales muertos, de acuerdo a un informe elaborado por el Programa de Monitoreo Sanitario de Ballena Franca Austral.

En diálogo telefónico con DIARIO DE CUYO, la coordinadora del programa Andrea Chirife, explicó que la tarea de conocer las causas de la muerte de estas ballenas se complica, porque sus cadáveres tardan en llegar a las costas y generalmente cuando aparecen en la Península de Valdés ya se encuentran en estado de descomposición como para elaborar estudios más rigurosos.

"Hasta el momento solo manejamos hipótesis, debido a que los estudios que realizamos son a muy largo plazo", comentó la veterinaria Chirife. "Del total de 369 cetáceos muertos (encontrados desde que el programa comenzó en 2003), el 91 por ciento son crías nacidas en temporada. Por lo tanto, la hipótesis que más se tiene en cuenta es la falta de alimentación de las madres, ya que las hembras no comen bien. Por eso les falta energía para tener partos normales y para amamantar en buenas condiciones".

Indicó también que "la escasez de alimento es consecuencia del calentamiento global, ya que el Krill (crustáceo similar al camarón) que comen las ballenas francas australes se ubica debajo del hielo y al no haber mucho hielo no hay alimento suficiente". Sin embargo, Chirife consideró que también preocupan algunas enfermedades infecciosas como la bruselosis, que produce abortos. Otras de las posibles razones de estas muertes puede encontrarse en la marea roja, provocada por una excesiva proliferación de microalgas con elevadas concentraciones de toxinas.

Desde que se iniciaron las investigaciones, 2008 fue el año que que se registró en la Península de Valdés una mayor cantidad de cadáveres de ballenas francas australes, la única especie que merodea por las costas chubutenses: hace dos años se encontraron 95 animales muertos, mientras que en 2007 se registraron 83. En lo que va de la temporada 2010 sólo vararon 3 ballenas muertas, pero todavía no llegan muchas cantidades de ejemplares ya que los meses más fuertes comienzan en agosto.

Según Chirife, Argentina es el único país del mundo en que los cadáveres llegan a las costas, por tratarse de una península (la de Valdés) cuya topografía es cerrada. Mientras que en otro tipo de costas, los cadáveres quedan en el mar sin ser arrastrados por el agua hasta la arena. Agregó que "es muy importante la colaboración de toda la sociedad chubutense, ya que casi el 80 por ciento de los hallazgos se da por particulares que avisan a las autoridades’.