Uno de los factores que desencadena una buena parte de los accidentes de tránsito es la falta de conciencia respecto de la responsabilidad que implica conducir un vehículo, más aún quienes se desplazan a velocidades superiores a los 120 km/h.

Resulta muy importante ser un conductor precavido, para no tener que lamentar accidentes que en el mejor de los casos le ocasionarán daños estéticos o mecánicos al auto, pero que también podrían ocasionar lamentables consecuencias.

Aquí se presenta una serie de consejos para adoptarlos como hábitos al momento de conducir, recordando que la gran mayoría de los accidentes se pueden prevenir.

* Todos los autos tienen puntos ciegos, la cantidad y localización de éstos, dependerá del diseño. La manera de detectarlos es con el uso de los espejos. Para ello es necesario tener precaución extra con los vehículos grandes ya que tienen más puntos ciegos, si se circula por detrás de un vehículo grande y no se ven sus espejos, es probable que el conductor no vea a quien viene detrás.

* Los semáforos: Con el cambio de luces, del amarillo al verde; no acelerar de inmediato, nunca falta un valiente que le quiere ganar al semáforo, el despistado que se pasa el alto, o incluso el que viene en sentido contrario o hasta marcha atrás.

* Las vueltas: Darlas con precaución y ver al sentido opuesto antes de girar el volante, puede aparecer repentinamente algún peatón, otro auto o una moto. Acostumbrarse a mirar hacia ambos lados antes de avanzar.

* Atención a la zona por la que se transita: Hay que estar atentos y respetar los límites de velocidad, principalmente si la zona es escolar o residencial, recordar que detrás de una pelota siempre hay un niño.

* Intersecciones: Es importante manejar la política del segundo vistazo, en ocasiones con el primero no es suficiente, y en fracciones de segundo las cosas cambian, acostumbrarse a ver dos veces.

* Utilizar el carril adecuado: A pesar de que los límites de velocidad están señalados en algunas zonas, no siempre son respetados. Si circula por el carril de alta velocidad y el de baja está vacío hay que estar consciente de que algún desesperado podría intentar pasar por la derecha. Hay que tratar de mantenerse en un solo carril y no manejar en zigzag.

* Ceder el paso: Hay que ceder el paso en condiciones adecuadas, la mayor cantidad de los accidentes de tránsito ocurren a bajas velocidades y muchos de ellos se dan porque ambos conductores querían pasar primero que el otro. Asimismo, cuando se circula por una vía rápida hay que permitir la incorporación de otros vehículos, desacelerar un poco y evitar las frenadas bruscas o en el peor de los casos un impacto.

* Acostumbrarse a no circular pegados al vehículo de adelante, si bien es cierto, en ciudades congestionadas esta práctica se ha vuelto común, es preferible dejar una distancia prudente por cualquier eventualidad. En la ruta dejar mayores distancias con respecto del auto que circula delante es todavía más importante, si se va a una velocidad considerablemente alta, se necesitan muchos metros para poder frenar bien.

* Mantener el auto en buen estado, hacer los servicios conforme indica el manual y no escatimar en la seguridad. Si ha llegado el momento de reemplazar ruedas, amortiguadores y demás componentes de desgaste, aunque las piezas originales o de marcas homologadas sean más costosas garantizarán un desempeño adecuado ante cualquier circunstancia.

* Es importante conocer el auto que se maneja, desde donde encontrar el extintor hasta saber cómo se comporta cuando llueve, manejo en curvas, respuesta de los frenos y demás elementos que ayudarán a manejar bajo los límites adecuados para el vehículo.

Fuente: Terra Autos