El portero Jorge Mangeri fue condenado ayer a prisión perpetua por haber abusado sexualmente y matado a la adolescente Ángeles Rawson, en junio de 2013, en el edificio del barrio porteño de Palermo donde la chica vivía con su familia y en el que trabajaba el acusado, a quien se le aplicó el delito de ‘femicidio‘.

El Tribunal Oral en lo Criminal 9, integrado por los jueces Fernando Ramírez, Jorge Gettas y Ana Dieta de Herrero, condenó a Mangeri por femicidio, abuso sexual y homicidio agravado por ‘criminis causae‘ (matar para ocultar el abuso).

Mangeri recibió la sentencia en silencio y con la mirada baja, como en casi todo el juicio oral, y fue retirado de la sala de audiencias por personal del Servicio Penitenciario Federal (SPF).

‘Hoy sentimos un poco de alivio, se hizo justicia por nuestra hija. El dolor que sentimos lo vamos a seguir sintiendo siempre. Cuando escuché el veredicto tuve una mezcla de sensaciones: quería gritar, tirarme arriba del asesino, salir corriendo‘, dijo tras el fallo Franklin Rawson, el padre de Ángeles, quien tenía 16 años cuando fue asesinada.

Por su parte, la madre de Ángeles, Jimena Aduriz, le agradeció entre lágrimas a los jueces por la condena a Mangeri.

El tribunal también ordenó abrir una investigación por presuntos delitos de acción pública -posiblemente falso testimonio o encubrimiento- contra la esposa de Mangeri, Diana Saettone; su amigo Jorge Meniguelli, el perito de la defensa Adolfo Méndez y los vecinos del edificio Pablo Bazán Domínguez y Juan Manuel Cesarett.

Hoy sólo se conoció la resolución del tribunal oral y sus fundamentos estarán el próximo 24 de agosto a las 13. Tras el veredicto, el abogado de Mangeri, Adrián Tenca, dijo que el fallo no lo sorprendió porque ‘era algo esperable‘ ya que el Tribunal Oral tuvo ‘una parcialidad manifiesta respecto del imputado‘. ‘No me sorprende el veredicto más allá que es un escollo en el camino porque ante la Cámara de Casación, la Corte Suprema vamos a demostrar que Mangeri es inocente. Voy a esperar los fundamentos para apelar‘, sostuvo Tenca.

Tanto la querella como la Fiscalía sostuvieron que la mañana del 10 de junio de 2013 Ángeles volvía de una clase de gimnasia a su departamento del edificio de la calle Ravignani 2360, en el barrio de Palermo, donde Mangeri era encargado.

El hombre la interceptó en el hall de entrada y la llevó a su departamento. Allí intentó abusar sexualmente de Ángeles -para la querella lo hizo en su departamento y para los fiscales en el sótano del edificio- y como no pudo violarla la mató estrangulándola, tras lo cual le ató los tobillos, las manos y el cuello con una soga, la puso en una bolsa de residuos y la tiró a la basura. El cuerpo apareció a la mañana siguiente en un predio de la Ceamse de José León Suárez. Mangeri quedó detenido la noche del 15 de junio, cuando fue a declarar como testigo a la fiscalía de Paula Asaro, quien durante su relato le ordenó que no continúe haciéndolo porque pasaba a ser acusado. La principal prueba contra Mangeri es que en las uñas de Ángeles y en las sogas con las que fue atada se encontró ADN del portero.