Prisión preventiva y un embargo de 100.000 pesos. Esa decisión tomó anoche el titular del Cuarto Juzgado de Instrucción, Maximiliano Blejman, contra María Celina Correa (20), la chica que intentó hacerles creer a sus familiares y amigos que estaba embarazada y que llevó su obsesión a límites insospechados: el 4 de junio último puso en evidencia la fragilidad de la seguridad privada en Maternidad del Hospital Rawson, robándose como si nada a Nicole, la recién nacida de Pamela Rodríguez. La descubrieron por fingir que había parido en el Sanatorio Argentino.

La decisión del magistrado se basó en numerosa evidencia, incluido el informe del psiquiatra que reveló una personalidad histriónica en la joven por su capacidad para dar explicaciones ‘imaginadas, dramáticas’, pero no detectó en ella problema mental que le impida comprender. Es decir, es imputable.

Justamente ayer, Correa amplió su indagatoria. Se contradijo con su primera versión e insistió en que no robó a la beba ya que los padres de la criatura se la dieron y hasta la amenazaron para que les diera dinero. Sus abogadas Carolina Correa y Mariela Rojas se mostraron sorprendidas por el fallo y anticiparon que apelarán.