En la primer frase frente a luces y micrófonos, Alberto ‘Puchi’ Ontiveros definió como el “comienzo de un sueño” la presentación de su proyecto que está a punto de concretar, tras mucho tiempo de anhelo y esfuerzo.
“Desde que tenía cinco años creo que me ilusionaba con correr un Dakar. La posibilidad de hacerlo empezó cuando llegó el Rally a Sudamérica”, definió el piloto al que separan 17 días de su anhelado debut en la carrera de 14 etapas que pasa por tres países.
Ayer presentó la Yamaha 450cc con la que encarará su mayor desafío deportivo, que repercutirá también en otros aspectos de su vida. Su compañera, que estará identificada con el número 79, está especialmente preparada para el Dakar: debe llevar más combustible (30 litros para tener una autonomía de 300 kilómetros) y la suspensión es especial para travesías a campo traviesa. “El motor es estándar, sí tiene escape de competición. La velocidad final que puede alcanzar es de 160 kilómetros por hora”, agregó el ganador del Dakar Challenge en el último Desafío Ruta 40.
Ontiveros acordó con el equipo argentino PCP para preparar una moto más resistente, y por lo tanto más pesada. “Será mayor la exigencia física, pero la moto será más confiable en piso roto. El objetivo es completar la vuelta”, comparó.
El encanto del Dakar radica en superar las situaciones hostiles. El ‘Puchi’ se siente especialmente ansioso por la etapa boliviana. “La etapa argentina es muy exigente pero ya tengo una idea de lo que me espera cada día. En Bolivia será algo nuevo para todos. La altura y el frío serán dos condicionantes muy importantes. Además, ahí se realiza la etapa maratón, que consiste en pasar una noche en un campamento, sin asistencia. Solamente se puede utilizar las herramientas y lubricantes que estarán en un camión y nadie podrá ayudarte salvo otro piloto”, relató.
En el resto de la competencia la moto será asistida por el PCP y Ontiveros buscará el descanso reparador en una combi acondicionada como casa rodante.
Como en toda conferencia, el protagonista de esta historia agradeció a “quienes me acompañaron, especialmente a mi viejo. Y también, al apoyo del Gobierno de la Provincia y a las empresas que hicieron esto posible”.
Si bien soñaba con esto “hace más de 30 años”, Ontiveros fue subiendo cada peldaño de una escalera que empezó a transitar “desde 2009. Hablábamos con Mauro Ayesa y así fue que compré la Beta y fui dejando el enduro para correr en cross country”.
Entre los invitados que respondieron a la cita, estaban otros dos equipos sanjuaninos que van por su propio Dakar, Ricardo Martínez y los hermanos García. Mario Peñafort y el propio Ayesa también quisieron acompañar en este momento a Ontiveros, que mostró que subió la escalera para alcanzar su objetivo.
