Sucedió en pleno centro y desde la Municipalidad de la Capital todavía no pueden creer lo que pasó, ya que dijeron, no hay precedentes de una situación similar. Es que un abogado puso a su hijo de 10 años en el baúl del auto que estaba mal estacionado, para evitar que la grúa municipal se lo llevara. Esto ocurrió el viernes pasado, pero recién salió a la luz ayer.
El abogado Jorge Crifó dejó su Peugeot 206 estacionado en la zona de parada de taxis, cuyo cordón estaba pintado de amarillo. Fue en calle Laprida entre Avenida Rioja y Tucumán. Los inspectores municipales, alrededor de las 21.15 del viernes pasado, detectaron esta contravención y como el vehículo estaba vacío procedieron a labrar el acta de infracción y encintarlo para poder removerlo con la grúa, tal como se hace en estos casos. Fue cuando Crifó llegó al lugar y atinó a colocar al niño en el baúl para evitar la remoción. “La grúa no se puede llevar un vehículo en el que hay una persona y mucho menos si es menor de edad. Por eso en ese caso se da intervención a la Policía”, dijo Juan Sánchez, coordinador de Gabinete del municipio de la Capital. Fue en ese momento que la discusión entre el abogado y el personal municipal se puso tensa. Desde la comuna dijeron que el hombre amenazó a los inspectores con reprimendas y sacó a la luz su título de abogado. Pero el escándalo no quedó ahí. En el momento en que los inspectores realizaban la denuncia en la Comisaría 1era, Cifró llegó para hacer una exposición argumentando que fue maltratado por los trabajadores municipales. La discusión, según contaron los inspectores, siguió un tiempo más y la grúa terminó por remover el vehículo en infracción.