De los 20 hijos de Johann Sebastian Bach, siete fueron de su primer matrimonio con su prima segunda María Barbara Bach y trece con su segunda esposa, Anna Magdalena Wilcke. El 5to hijo de su primer matrimonio fue Carl Philipp Emmanuel (1714-1788). Se trata de uno de los mayores clavecinistas de Europa asociado al ‘Empfindsamer Still’ (‘Estilo sensible o sentimental’), que fue ya vislumbrando más allá del Barroco y del Clasicismo al mismo Romanticismo, que tiene mucho que ver con la forma Sonata; y que es un verdadero precursor de Haydn o del mismo Mozart aunque éste se identificara mucho más con otro Bach: Johann Christian. Las Sonatas de C. P. E. Bach eran generalmente compuestas para dos o tres instrumentos. El Maestro Rodríguez-Castillo nos ofreció un arreglo propio para órgano de su Sonata en Sol Mayor en sus tres amplios movimientos. El así llamado ‘Flugelhorn’ (literalmente ‘corno con alas’) o en español ‘Flicorno’ es una especie de trompeta de sonido más suave cuyo origen es atribuido a varios, pero de hecho más extendido en Alemania y desde allí a Europa con nombre alemán. Fue adecuado entonces que lo escucháramos en una obra por demás suave, y delicadamente acompañado por el órgano; el conocido ‘Ave María’ de Schubert (1797-1828). Todos conocemos la pieza pero en realidad quizá pocos sepan que en realidad se titula ‘Ellens dritter Gesang’ (‘la tercera canción de Ellen’) inspirada en un Poema de Walter Scout ‘La Dama del Lago’. En este poema el personaje de Ellen canta una canción dirigida a la Virgen. Las palabras iniciales dieron lugar luego a una plena adaptación latina. Pero el original de Schubert era en alemán.

Seis años antes, en 1819, Rossini había utilizado el mismo poema de Scott para una de sus óperas más melodiosas: ‘La Donna del lago’. De todos modos el trompetista Javier Conturzo no la dedicó a la Virgen sino a sus seis mujeres. Aclaremos por las dudas que no es musulmán; las mujeres eran su esposa, sus cuatro hijas y… ¡su suegra! Y hablando de instrumentos de viento particulares hubo un fabricante de estos y hábil intérprete de vientos ‘madera’ y ‘bronces’ nacido en Sajonia, casado con una mujer de Varsovia y emigrado a Kiev (en ese entonces parte de Rusia) -Ernst Moritz Glier-. Allí en 1875 nació su hijo Reinhold Ernst, quien a los 25 años modificó su apellido en Gliére.

Tuvo más suerte que Prokofiev o Shostakovich o Khachaturian en el sentido de que su música, suave y armoniosa, escapó a los censores del régimen y no desagradó al mismo Stalin. Por ello fue nombrado ‘Artista del pueblo de la URSS’ y recibió innumerables premios.

Escuchamos como ejemplo de esta delicadeza musical, algunas de sus ‘Ocho Piezas’ Op. 39 para cello y violín I): Prelude: Inicio lento y algo lamentoso pero que va aumentando su ritmo. II) Berceuse: En francés: ‘bercer’ es ‘mecer’. Por ello ‘berceuse’ es ‘mecedora’ o simplemente ‘canción de cuna’. III) Canzonetta: o ‘Cancioncita’; si dejar su aire propio eslavo, evoca algo más ‘italiano’ IV) ‘Intermezzo’: De ritmo danzante y ansioso, es casi un vals, y es la pieza más corta.

Debido a un error en la impresión del programa quedaron impresas solo tres de las piezas produciendo la sorpresa de que cuando estaban por terminar las tres piezas mencionadas, apareció una cuarta. J. S. Bach (1685-1750). A simple vista (o a simple oído) se nota que en la Toccata y Fuga en Fa mayor BWV 540 no sería una obra unitaria sino que probablemente la Toccata sería de 1714 y la Fuga más sobria, sería de 1731. Me sorprende y cautiva el desempeño virtuoso de la pedalera. Los pies deben moverse ágil y precisamente y los del Maestro Rodríguez Castillo ciertamente lo hicieron.

Tomaso Albinoni (1671-1751) es uno de lo principales compositores de la ‘Serenísima’ República de Venecia. Escuchamos un Concierto para trompeta, continuo y cello. En este caso la trompeta era una ‘piccolo’ que es casi la mitad de una trompeta ‘normal’ pero que posee un impresionante poder sonoro. I) Grave: II) Allegro: Totalmente italiano pero me recuerda a los ingleses Jeremiah Clarke (1670-1707) o John Stanley (1712-1786). Es que los ingleses de aquella época sonaban también muy italianos.

Una clarísima digitación de Javier Conturzo III) Adagio: La parte del continuo (en este caso el órgano) recuerda al ‘famoso’ Adagio de Albinoni, y es que en realidad ese tema resultó no ser de nuestro compositor veneciano sino de un critico musical y biógrafo de Vivaldi y Albinoni nacido en 1910, Renzo Giazzoto.

¡El ‘Adagio’ popularizado podrá haberse inspirado en éste! 4) Allegro. Maravillosa combinación de los tres instrumentos, el cello siempre necesario y presente, el órgano acompañando delicadamente y el cristalino y afinado sonido de la trompeta piccolo. Hermoso concierto pero la pieza fuerte fue la ‘Pedalera’ del órgano de la Toccata de J. S. Bach.