Un golpe en la puerta con la imitación del jingle del famoso humorista Carlitos Balá, y segundos después el ruido de una moto acelerando a fondo. Esos sonidos escucharon ayer en la madrugada Flavia Páez (25) y Débora Zalazar (19), cuando dormían en la casa de su amigo, Julio Augusto "Tito" Porra, un anciano de 79 años que vive en el barrio Belgrano, Rawson. Al levantarse para ver quien golpeaba, el resplandor de las llamas que se asomaban por la ventana de una cocina y la puerta de ingreso de la vivienda, les puso los pelos de punta a las muchachas que corrieron y despertaron al hombre. Después, la desesperación por escapar y los gritos de auxilio de las víctimas por las ventanas. Y ese llamado de ayuda alertó a los vecinos que de inmediato llamaron a la Policía. Rápidamente los uniformados llegaron, rompieron una reja de una ventana y rescataron al anciano y sus amigas de la casa en llamas, precisaron las víctimas. Luego, los bomberos controlaron el siniestro que consumió un par de puertas, mampostería, maderas, aparatos y muebles en desuso antes de que se extendiera al resto del inmueble, dijeron en la Policía.
"Esto no fue un accidente, fue intencional", decía molesto "Tito" Porra, mientras miraba los escombros de las cosas que juntaba en su casa de calle Alfonsina Storni 1969 Sur. Es que el anciano sospechaba que el ataque tuvo algo que ver con dos jóvenes (que no conoce) con los que horas antes tuvo un altercado cuando iba a comprar, dijo Porra. "Fui a comprar y me siguió mi perro. Estos muchachos provocaron al perro y les ladró. Yo les dije algo y me insultaron, hasta amenazaron con largarme una piedra y se fueron", aseguró el anciano.
Más tarde llegaron sus amigas y se quedaron a dormir. Alrededor de las 3.30 fue cuando golpearon y escucharon la moto escapar, precisó Zalazar. Cuando las dos chicas se levantaron, vieron el fuego que había obstruido las salidas y despertaron a "Tito". Trataron de salir, pero era imposible y comenzaron a gritar, contó Páez.
Luego, llegaron policías del Comando Radioeléctrico y la Motorizada Nro. II y arrancaron la reja de la ventana de la pieza del hombre para rescatarlos. Minutos después, una dotación de bomberos de Rawson controló el siniestro, que al parecer, habría sido intencional, precisaron fuentes policiales.
"Si no nos salvan, nos morimos asfixiados. Hay un Dios y será él quien juzgue al que hizo esto", dijo Porra.
