Un empleado de una pollería de Rawson intentó ayer meterse a robar a ese local, pero eligió mal el lugar por donde entrar y quedó en ridículo: lo hizo por un ducto de ventilación del techo de unos 70×40 cm y al descender quedó atorado. Desesperado, pidió ayuda como pudo y tras el aviso de un comerciante vecino que escuchó sus gritos, bomberos de la Policía lo rescataron al borde de la sofocación, informaron fuentes policiales.
El sospechoso apresado fue identificado en la Policía como Dan Gerson Borguhetti, un joven de 20 años que trabajaba para la firma ‘La Pollería de Rivadavia’, de Comandante Cabot 3.100 Oeste, Rawson. Sus compañeros solo se limitaron a confirmar a este diario que el detenido era empleado de la firma. Fuentes de la investigación agregaron que sus empleadores le tenían mucha confianza a Borguhetti, estaba muy bien remunerado y hacía 3 semanas que lo habían cambiado a otra sucursal de la empresa.
La versión policial señala que a la 1.50 un comerciante asiático, que tiene su negocio al lado de la pollería, escuchó al menos a 2 personas caminando por el techo, el cual tiene unos 5 m de altura. Al principio, no le dio importancia a los ruidos porque sus vecinos comienzan a trabajar en la madrugada y por eso creyó que estaban haciendo alguna refacción. Pero al rato escuchó pedidos de auxilio que provenían del local contiguo y por eso llamó al 911. Al rato, subió al techo acompañado de un policía de la Seccional 25ta y allí encontraron una llave francesa y una rejilla desatornillada de un ducto de ventilación que da al baño de la pollería, informaron en la Policía.
En principio creyeron que no había nadie, pero una revisión más minuciosa del conducto reveló de donde provenían los ruidos: era Borguhetti, quien estaba atorado casi llegando al suelo, en un tramo donde el tubo se angosta en una curva, señalaron las fuentes. Los policías le arrojaron una soga, pero como el joven no podía moverse debió intervenir una dotación de bomberos de Rawson para cortar el ducto y sacarlo.
