– Elaborar un perfil de la Universidad que esté al servicio de la comunidad, de la región y el país. Atender y dar solución a todos los problemas de los más necesitados, no sólo de las grandes empresas.

– Ampliar la convocatoria a todos los sectores, al personal docente, al de apoyo universitario, a los alumnos y a los egresados para definir el perfil que va a tener la Universidad. Fomentar el debate para buscar cuáles son las mejores ideas y criterios que debe seguir la Universidad.

– Defender la estabilidad del docente y del personal de apoyo. Que se capaciten, que avancen y que hagan una verdadera carrera. Ponerle a disposición los medios necesarios para perfeccionarse.

– Reforzar la partida para becas que atienda las necesidades de los alumnos, porque la Universidad, con el solo hecho de ser gratuita, no garantiza que todos los jóvenes puedan estudiar.