La presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció esta semana el llamado a licitación de 17 tramos del Ferrocarril Belgrano Cargas, por un monto de 2.322,7 millones de pesos, que serán invertidos en la modernización de ramales y sistemas operativos en Formosa, Salta, Chaco, Santiago del Estero y Santa Fe, a pesar que la línea recorre doce provincias.

Las obras favorecerán a la actividad agrícola, industrial y minera en las citadas provincias, incluyendo la recuperación del Corredor T, que une Salta con los puertos de Barranqueras, Avia Terai y Rosario. Este ferrocarril de trocha angosta transporta por año alrededor de un millón de toneladas de granos, particularmente soja y productos agropecuarios de Córdoba al Norte y hacia Chile, Bolivia y los puertos de Rosario y Buenos Aires.

El proyecto actual es elevar los fletes a 10 millones de toneladas anuales y extenderlo a la minería, según lo informado, lo cual se pone en duda si recordamos que el mayor emprendimiento minero del país se localiza en nuestra provincia y el vital ramal a Jáchal lleva décadas de abandono. Tampoco menciona el plan los enlaces de San Juan-Córdoba y de allí a Rosario, como tampoco hacia Mendoza un histórico nexo en las cargas vitivinícolas. Es que a pesar de los reiterados anuncios y promesas oficiales de mejoras al Belgrano Cargas, la operación de esta línea sigue siendo deficitaria y no responde a todas las demandas de fletes de las economías regionales. Es la consecuencia de los pésimos gerenciamientos de un servicio clave para el Norte argentino manejado políticamente por los gremios ferroviarios y de los camioneros de Moyano.

En esta coyuntura afloran las rispideces del año electoral y la sugestiva exclusión de la concesión sindical, en particular del líder de la CGT, en las intenciones de mejorar el polémico ferrocarril, declarado en estado de emergencia a mediados de 2006. Desde entonces el Estado cubre con 25 millones mensuales el pago de sueldos y los costos operativos como el mantenimiento de vías y material rodante.

Es de esperar que las licitaciones anunciadas por la presidenta se cumplan en tiempo y forma para que el estratégico ferrocarril Belgrano sea el medio idóneo de transporte que demandan los productores y para ello debe ser competitivo frente a otros medios porque en cargas pesadas en ningún país del mundo se ha prescindido de los trenes. Mucho más importante en la Argentina donde el liderazgo del camión ha encarecido en extremo los fletes. Si no se trata de otro anuncio de campaña, la recuperación del Belgrano Cargas dará impulso a la economía, aunque sea en sólo cinco provincias.