Consejos útiles -Elegir correctamente las frutas, desechando la excesivamente maduras, y las que presenten magulladuras. La piel de la fruta debe presentar aspecto liso y sano. -No quitar el cabito a las frutas antes de lavarlas, para evitar que el agua penetre en el interior de la fruta y diluya su sabor. -Emplear preferentemente pailas de cobre. En cambio nunca usar de aluminio ya que el ácido de las frutas ataca a este metal. -Siempre revolver los dulces con cucharas de madera. -El éxito de la conservación depende en gran medida de la elección de los envases, los que deben ser resistentes a las temperaturas de esterilización a 100 ó 120 grados, tener los bordes planos y lisos, ser fáciles de limpiar, no deben tener boca demasiado ancha y cerrar herméticamente. -Para esterilizar los frascos donde se colocará el dulce hay que seguir una serie de pasos: lavar bien los envases, hacerlos hervir 15 minutos sin las tapas, luego dejarlos enfriar en el agua, retirarlos y colocarlos boca abajo sobre una rejilla o fuente, llevarlos en horno suave por un lapso de 10 minutos hasta que queden bien secos. Por otro lado, rociar las tapas con agua y alcohol y dejar secar. Una vez que se han llenado los frascos con el dulce, tapar y hervir los frascos, cuidando que el agua no llegue a la tapa por 15 minutos, desde el momento de ebullición. -Es importante rotular los envases una vez llenos, indicando el contenido y fecha de envasado. -Conservar los dulces envasados en un lugar seco y oscuro.
